Desde que uno abre la puerta del restaurante Green Field, entra al mágico mundo de Brasil, con sus contagiosos ritmos de samba y bossa nova, la alegría de su gente y, sobre todo, la rica variedad de su comida, producto de la exuberancia tropical que envuelve a ese país sudamericano.
Localizado en el 5305 de E. Pacific Coast Highway (PCH) , en Long Beach, el Green Field se encuentra a unos minutos de la estación Willow de la Línea Azul del Metro (Blue Line). Una vez ahí, hay que caminar una calle hacia PCH y tomar el autobús número 171 que lo dejará en la puerta del restaurante.
El Green Field es una “churrasquería”. Esta palabra no la tiene registrada la Real Academia Española, pero proviene del vocablo “churrasco”, un término que se utiliza para denominar un trozo grande de carne asada a las brasas o a la parrilla. En consecuencia, como nos explican los meseros del lugar, una churrasquería es el restaurante donde se prepara este tipo de carne.
Esta tradición tiene tres siglos de vida en Brasil, pero se popularizó a partir de 1900 con la llegada masiva de inmigrantes italianos y alemanes al sur de Brasil, una de las zonas más fértiles del país, conocida como las Pampas. Después de esperar las cosechas, los inmigrantes se reunían dos veces al año para celebrar con frutas, legumbres y carnes de res, cerdo, pollo, pavo e incluso pescado. Todos podían comer lo que les apeteciera hasta saciarse.
Conforme la población creció, la gente de las Pampas empezó a abrir restaurantes inspirados en este tipo de celebración, tal como lo hacían los gauchos, pero con la calidad de servicio de los europeos. El concepto se popularizó y se convirtió en parte integral de la cultura brasileña.
El Green Field se creó justamente con este concepto. En el restaurante no existe un menú. En lugar de ello, los comensales pueden consumir todo lo que el restaurante ofrece por un precio fijo. El almuerzo cuesta $16.95 y la cena $29.95. Las bebidas y los postres se cobran aparte.
Aunque la atmósfera del restaurante es definitivamente formal, se respira un ambiente relajado gracias a la acertada combinación de plantas con la madera oscura del mobiliario y a los grandes ventanales con vista a un amplio campo de golf. Cada detalle de la decoración evoca a Brasil, desde un enorme mural inspirado en las playas de Río de Janeiro hasta otro con la distintiva bandera amarilla y verde.
El atractivo principal del restaurante es, sin embargo, el amplio bufete colocado al centro donde se despliegan 30 diferentes tipos de ensaladas de verduras frescas, ya sea solas o combinadas con pastas, atún y pollo. Hay también una gran variedad de sopas y de guisados calientes como albóndigas en caldo de jitomate y varios platillos típicos de Brasil como la rabada (cola de res), el arroz tropero y la famosa feijoada (con frijoles negros).
Una vez que uno selecciona lo que más le apetece del bufete y se sirve cuantas veces quiera, pone sobre la mesa un cubo de madera con colores verde y rojo en los extremos. Si coloca el verde arriba significa que uno quiere que el mesero le sirva, el rojo representa obviamente lo opuesto.
Es aquí donde la aventura se torna más interesante. Los meseros empiezan a pasar por las mesas con distintos cortes de carne de res, pollo, cerdo, cordero, pato, pavo y pescado. La carne se lleva directo de la parrilla a las mesas ensartada en agujas o broquetas y los meseros la cortan frente a la clientela.
A partir de entonces lo que experimenta uno es un verdadero festín. Debido a la forma peculiar en que se corta y prepara la carne en estos restaurantes, se conserva el sabor natural y los jugos de cada una de las porciones. Éstas prácticamente se disuelven sin esfuerzo en el paladar debido a su suavidad. Lo mejor de todo es que se puede pedir lo que uno apetezca, cuantas veces lo desee.
Para disfrutar como debe ser cada porción, les recomiendo ir con tiempo. No vale la pena ir a la carrera. El restaurante cuenta también con un bar donde se sirven todo tipo de vinos, cocteles y cervezas. Si lo prefieren, pueden pedir también jugos naturales de frutas como maracuja, melón, fresa, piña o toronja. En el remoto caso que aún no hayan quedado satisfechos y tengan antojo de un postre, hay una amplia variedad de pasteles, helados y flan.
Información general
Green Field
5305 E. Pacific Coast Highway
Long Beach, CA 90804
562-597-0906
Horario de domingo a jueves de 11 a.m. a 10 p.m.
Horario de viernes y sábado de 11 a.m. a 11 p.m.
Horas de almuerzo de 11 a.m. a 3 p.m.
Horas de cena de 3 p.m. en adelante
Por Metro: tomar la Línea Azul y bajarse en la estación Willow. Caminar una calle hacia PCH y tomar el autobús 171.
Categories: Go Metro