Para Diane Corral-López lo más importante en la vida es tener un balance. “Hay que dedicar tiempo al trabajo y al estudio, pero también a la familia, al descanso y a la diversión”, dice en tono convincente.

La fórmula le ha funcionado a Diane, quien desde todos los puntos de vista es una mujer triunfadora. Además de ocupar un cargo de gran importancia en Metro, el de subdirectora ejecutiva del Departamento de Administración de Operaciones, disfruta al máximo su papel de esposa y madre.

“Tengo un trabajo que me encanta y además una vida familiar muy completa pues he estado felizmente casada por más de 16 años y tengo un pequeño hijo que es mi gran alegría” , asegura con una gran sonrisa.

En su puesto actual, Diane tiene a su cargo a 42 empleados y sus principales responsabilidades incluyen planificar y dirigir las actividades de los servicios de Gerencia, Administración, y Finanzas del Departamento de Operaciones de Transporte de Metro.

Aunque es un trabajo complejo que exige una gran responsabilidad, Diane confiesa que le gusta justamente porque es un reto, puesto que cada día surgen situaciones y problemas distintos que debe resolver.

Diane entró a trabajar a Metro en diciembre de 1996 como analista administrativa de Operaciones. Aquí, entre otras tareas, estaba a cargo de preparar y desarrollar presupuestos.

Luego de dos años la promovieron a analista principal de ese Departamento y en febrero de 2001 dio otro gran salto al convertirse en la jefa de analistas administrativos de la Oficina del Director General Ejecutivo de Metro.

Finalmente, antes de llegar al puesto que ahora tiene, la nombraron gerente ejecutiva de administración, donde asumió el liderazgo para supervisar la finalización de proyectos importantes en varios departamentos de Metro.

La funcionaria estudió Ciencias Políticas en Cal State Northridge y después decidió hacer una maestría en Administración Pública en la Universidad del Sur de California, una decisión por demás acertada pues fue la que finalmente le abrió las puertas para llegar al sitio donde hoy está.

Su primer trabajo fue en la Unidad de Planificación e Investigación del condado de Los Ángeles, donde –entre otras tareas- participó en un programa piloto con el Departamento de Justicia para automatizar la disposición de información. Sus deseos de progresar la llevaron a Pasadena donde trabajó muy de cerca con el alcalde y los concejales para impulsar varios proyectos de la ciudad.

El amor por el trabajo y la dedicación a su hogar son valores que heredó de sus padres. “Yo provengo de una familia muy conservadora, en la que lo más importante es la educación y el trabajo para sacar adelante a la familia”, dice Diane, quien es originaria de Los Ángeles.

Los padres de Diane también nacieron en Estados Unidos, pero sus abuelos tienen raíces en Durango, México. “Nos consideramos mexicanos de tercera generación”, manifiesta con orgullo.

Además de convivir siempre que puede con sus padres y hermanos, Diane subraya que dedica todo el tiempo que puede a su hijo. “Me gusta mucho viajar con él en tren para que vea el trabajo que hago. Además salimos mucho al cine, al teatro, al parque. Mi principal meta es que él se convierta en una persona de bien, en un ser humano que sirva a los demás”, dice.

Diane se considera más que afortunada, tanto por su familia como por trabajar en Metro. “Esta es una agencia que brinda muchas oportunidades para salir adelante y yo las he aprovechado”, concluye.