La Junta Directiva de Metro considerará este mes las recomendaciones para finalizar e implementar el ambicioso Plan Maestro de Union Station. El proceso empezará el miércoles en la reunión del Comité de Planificación de la Junta de Metro a las 2:30 p.m. Se espera que el pleno de la Junta vote sobre el asunto en su reunión del 2 de octubre. Aquí, el reporte más reciente del personal de Metro.

Las recomendaciones del personal ofrecen un camino para los proyectos a corto y largo plazo y para los futuros desarrollos comerciales en la estación. Metro compró Union Station a una firma privada en 2011 y quiere convertirla en una instalación de primera clase mundial con mayor capacidad para albergar un tren de alta velocidad, pero sin descuidar su carácter histórico.

Una de las recomendaciones principales del personal de Metro es iniciar oficialmente el reporte del programa ambiental (EIR) para algunas de las grandes mejoras que se contemplan en el Plan Maestro, como la expansión del vestíbulo bajo las vías actuales y la reubicación de la Plaza Patsaouras más cerca del lado oeste de las vías de los trenes.

El reporte ambiental también permitirá que Metro empiece la primera fase de las mejoras cerca del perímetro de Union Station. Las mejoras específicas incluyen la remoción del estacionamiento en el lado norte de la entrada de Union Station y la creación de una plaza pública.

Estas mejoras, de acuerdo con el Plan Maestro, “suavizarán los bordes de la estación, crearán mejores conexiones con el Centro Cívico y con las comunidades históricas y culturales alrededor de la estación y darán la bienvenida a los pasajeros y visitantes que lleguen al eje del transporte del sur de California.”

Se han identificado ya varias subvenciones que ayudarán a financiar el trabajo de diseño para las mejoras en el perímetro. El personal de Metro busca la aprobación de la Junta para buscar esas oportunidades de financiamiento.

Metro ha estado trabajando en el Plan Maestro de Union Station durante los últimos dos años. La estación se inauguró en 1939 y servía en su mayoría a pasajeros de trenes que viajaban hacia diversas partes de California y del país. Los abordajes se han incrementado diez veces desde que la estación se abrió y llegan ahora a casi 110,000 al día. Se espera que crezcan a 197,000 diarios para 2040.