Cuando a los autobuses se les da la prioridad, también la obtienen los pasajeros

Como parte del cierre del segmento norte de la Blue Line — que está bajo un proceso de renovación— Metro ha desplegado autobuses especiales para transportar a los pasajeros que usualmente toman el tren. En la sección sur del centro de L.A., esos autobuses usan Flower Street, que ya de por sí está bastante congestionada.

Para mantener el tráfico fluido, el Departamento de Transporte de la Ciudad de Los Ángeles  (LADOT) y Metro están probando un carril especial para autobuses entre las 3 p.m. y las 7 p.m., entre semana. Gracias al LAPD, uno de los carriles en el borde de las aceras se usa para los autobuses.

Hasta ahora, el carril para autobuses ha sido un éxito: vean el video de arriba. El servicio de autobuses es más rápido y frecuente, lo que mejora la experiencia de miles de pasajeros que usan el autobús. 

Comparación de espacios entre autos, autobuses y bicis. Foto: Muenster, Alemania.

Metro considera que el carril para autobuses es eficiente porque este vehículo toma relativamente poco espacio en la calle y puede transportar fácilmente a  40 o más personas. Los autos, en cambio, típicamente solo llevan a uno o dos pasajeros, lo que resulta en que toman una gran cantidad de espacio, como lo muestran claramente las imágenes de la derecha, tomadas de una exhibición en Alemania.

La aceleración de la velocidad de los autobuses es parte del Plan Visión 2028 de Metro, que describe las estrategias de la agencia para la próxima década. Los autobuses de Metro actualmente tienen un promedio de 11 millas por hora y la agencia espera usar un amplio rango de opciones, entre ellas carriles para autobuses y prioridad en las señales de tráfico para alcanzar un mínimo de velocidad de 18 mph para las líneas de autobuses rápidos. 

La  idea es aumentar el número de gente que se puede transportar en la calle. Esto es algo bueno para los pasajeros actuales que puede hacer que el autobús sea una alternativa más atractiva para quienes no los usan. 

Pero también tenemos que ser realistas: los carriles para autobuses pueden provocar molestias del por qué se tiene que sacrificar un carril para el tráfico general o para estacionarse. Estas son las razones que se deben entender:  

• Los carriles para autobuses — como el de Flower — se pueden usar solo ciertas horas del día. Y el mover los autobuses en su propio carril los saca de otros carriles.

• Metro no puede instalar unilateralmente carriles para autobuses. Las calles son supervisadas por las ciudades donde están ubicadas. Esto significa que Metro tiene que trabajar con residentes, dueños de negocios y otras partes interesadas para colocar un carril para autobuses y mitigar otros impactos. 

Punto importante: Nuestros proyectos de autobús tienen la intención de dar a todos una opción buena y asequible para transportarse y no cambiar de manera fundamental los vecindarios o dañar la movilidad.

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