Metro planea convertir toda su flota de autobuses a vehículos de cero emisiones para 2030. La primera fase de esta transición se iniciará en la Orange Line con el despliegue de autobuses eléctricos. Para acomodarlos, Metro está instalando estaciones de carga de baterías en la estación North Hollywood de la Orange Line.

Debido a la construcción, el estacionamiento en el lote oeste permanecerá cerrado hasta diciembre de 2019. Como alternativa se pueden usar los lotes del norte, sur y este, a los que se puede entrar desde Chandler Boulevard o Cumpston Street.

La terminal de autobuses de North Hollywood de la Orange Line también permanecerá cerrada hasta diciembre de 2019. Las áreas para dejar y recoger pasajeros se reubicarán como sigue:

• Los autobuses se abordarán en la esquina noroeste de Lankershim y Chandler.
• El descenso de autobuses será en la esquina sureste Lankershim y Cumpston.

El servicio de la estación North Hollywood de la Red Line no será afectado.

Una nueva estación para cargar autobuses se construirá en la estación Canoga a mediados de noviembre y continuará hasta diciembre de 2019.

La transición a los autobuses eléctricos ofrecía una flota más limpia con menos impacto ambiental que ayudará a mejorar la calidad del aire.