Por Dave Sotero
Un par de lectores de la publicación The Source comentaron sobre uno de los artículos de la semana pasada sobre los puentes para el camino exclusivo de autobuses que se esta construyendo como parte del Proyecto de Extensión de la Línea Naranja. Los lectores querían saber si es que los nuevos puentes sobre el río Los Ángeles, Santa Susana y la calle Lassen son construidos lo suficientemente fuerte para aguantar el peso de los vagones del tren ligero en un futuro.
Es una pregunta razonable. Debido al gran número de usuarios de la línea, la cual sobrepasa los cálculos del número de pasajeros que se pensó en octubre del 2005, ha habido pláticas sobre realizar la conversión de autobuses al tren ligero. (Por cierto, el sexto aniversario de la Línea Naranja esta a la vuelta de la esquina el 29 de octubre)
En promedio, el número de pasajeros en la línea ha variado entre los veinte mil durante la semana. Sin embargo, en septiembre el número de pasajeros llego a 26,883, acercándose a la cifra record de 27,596 que se alcanzó en septiembre del 2008. Lo más posible es que haya sido causado por la temporada de regreso a la escuela.
El carril exclusivo de autobuses de 14 millas, entre North Hollywood y Canoga Park, da servicio a varias escuelas locales y universidades comunitarias.
Le hice esta pregunta Hitesh Patel, encargado del Proyecto de Extensión de la Línea Naranja. Patel reporta que los puentes de la nueva extensión han sido diseñados y construidos para tener la capacidad de soportar el peso de vagones en caso de una posible conversión al tren ligero en un futuro. Los puentes de la Línea Naranja en existencia, incluyendo el puente en el Área Recreativa Sepúlveda que también cuenta con la ingeniería para soportar el peso de los vagones del tren ligero. Eso se llama buena ingeniería.
Pero antes de que se emocionen mucho sobre el prospecto, es importante notar que Metro no tiene planes inminentes de convertir el carril exclusivo de autobuses a una línea de tren ligero. No hay fondos de la Medida R para un proyecto de este tipo, aunque el dinero se ha identificado para otras mejoras al transporte, entre ellas el Proyecto del Corredor de Transporte Sepúlveda Pass. Vea aquí la lista completa.
Así que, por ahora, la Línea Naranja en su extensión de cuatro millas hacia Chatsworth estará moviéndose sobre llantas de hule y no sobre ruedas de acero. Sin embargo, los puentes no serán un problema.