Henry J. González, el compromiso y la alegría de servir a los demás

Henry J. González asegura que se considera sumamente afortunado porque tiene un trabajo que le permite cumplir con lo que le da mayor satisfacción en la vida: servir a los demás.

“Si hay algo que me gusta y me produce alegría es ayudar a otras personas, hacer que su vida sea un poco más fácil”, dice González, quien es gerente de Relaciones con la Comunidad en Metro, donde dirige los esfuerzos de información y participación pública de los Consejos Regionales de Servicio.Estos Consejos, según explica Henry, tienen como finalidad facilitar la comunicación entre los funcionarios de Metro y los residentes de las zonas en las que la agencia presta sus servicios, ya sea de autobuses, trenes o autopistas.

El reto más grande de este trabajo, señala Henry, es “presentar de manera clara la postura de Metro y al mismo tiempo poder satisfacer las demandas y preocupaciones de los residentes en lo que respecta al transporte. En muchas ocasiones, hay forma de llegar a acuerdos y cumplir con lo que nos piden los residentes, pero a veces esto no es posible por problemas de presupuesto, de logística y obviamente ello produce frustración”, confiesa.

Henry cuenta con una gran experiencia en el ramo del transporte pues ha trabajado para Metro por 16 años. Antes de su posición actual, fue oficial superior de Asuntos Públicos y gerente de Planificación de Transporte. En este cargo estuvo al frente del enlace con la comunidad y de alcanzar consensos en distintos proyectos, entre ellos la Extensión de la Línea Dorada hacia el Este de Los Ángeles.

Debido a que lo que más disfruta es el trato con la gente, Henry –un hombre de sonrisa fácil que se caracteriza por su afabilidad- ha buscado siempre trabajar dentro del servicio público. Uno de sus primeros trabajos, luego de graduarse en Administración Pública de la Universidad del Sur de California, fue el de asistente del ex concejal angelino Richard Alatorre.

Gracias a que nació en Guadalajara, Jalisco y habla perfectamente el español, Henry ha podido servir como ‘puente’ entre funcionarios de su país de origen y de Estados Unidos. Por varios años fue el enlace entre la oficina de la Alcaldía de L.A y el Consulado de México . También trabajó en estrecha colaboración con el Departamento de Asuntos Culturales en la planificación y coordinación de eventos culturales como el Festival Anual del Mariachi en Boyle Heights.

En 1984, Henry formó parte del Comité Organizador de las Olimpiadas en L.A., donde trabajó como coordinador de Comunicaciones y Relaciones Públicas.

Su pasión por las causas sociales, culturales y educativas lo ha llevado a estar activo en numerosas organizaciones dedicadas a esos fines. Es miembro de la Junta Directiva de El Centro Del Pueblo, una agrupación que sirve a las comunidades de Echo Park, Silver Lake y Central City. Él también ofrece su tiempo libre como voluntario en Puente Learning Center, un centro de aprendizaje multi-generacional que atiende a los residentes de Boyle Heights y del sur de Los Angeles.

Henry es soltero y no tiene hijos, pero está dedicado por entero a cuidar de su madre, de 84 años de edad, con quien vive en la comunidad de Angelino Heights. “Ella es ahora como mi hija”, dice con una gran sonrisa este hombre que por ahora sólo se muestra agradecido por lo que la vida le ha dado.