Los tacos son los más solicitados en el restaurante ¡A que tacos Leonor! En el este de Los Ángeles. (Foto Agustín Durán/El Pasajero)

Viajando en la Línea Dorada del Metro, alcance a ver a un grupo de personas pidiendo su comida en una camioneta, justo afuera del restaurante A que tacos Leonor, en la esquina de la calle Tercera e Indiana, en el este de Los Ángeles.

Al ver como se amontonaba la gente, me tuve que bajar del tren de la Línea Dorada para ver que era lo que vendían o porque había tanta gente en esa camioneta de comida, ubicada en el estacionamiento del restaurante, el cual resultó ser el mismo dueño y la misma comida, pero dedicada para la gente que va más de prisa.

Los platillos como el pollo asado también son de muy buen sabor y a un precio al alcance de todos los bolsillos. (Foto Agustín Durán/El Pasajero)

Pronto me di cuenta que la mayoría de gente: parejas, trabajadores y una que otra familia con niños, disfrutaban sus tacos, que son los que prevalecían en medio de un festín de antojitos, desde burritos hasta tortas.

Entre al restaurante donde había otros comensales más relajados, disfrutando de sus platillos, pero de comida más elaborada, como guisados de platillos tradicionales o los mismos antojitos.

Con un huarache de $3.50 quedará más que satisfecho (Foto Agustín Durán/El Pasajero)

Aunque el menú ofrece desde desayunos, platillos mexicanos y sándwiches, lo fuerte del restaurante son los tacos, así que pedí uno de buche, uno al pastor, uno de carne asada, otro de lengua y una agua de Jamaica para empezar. Me cobró sólo cinco dólares, lo cual me sorprendí.

Por un momento pensé que el cajero se había equivocado pues por el tamaño de los tacos que sirven he pagado hasta $1.25 o $1.39 por cada uno. Pero en ¡A que tacos Leonor! el cocinero resulta ser muy generoso y los tacos vienen con suficiente carne para hacer hasta dos tacos y solo por un dólar.

La ambiente del restaurante es tranquilo, atractivo y muy limpio (Foto Agustín Durán/El Pasajero)

El buche estaba bien cocido, la carne asada tenía muy buen sabor y estaba bien picadita, la carne al pastor fue lo mejor y la lengua no se diga,  al prepararlos con la salsa verde y roja, su cilantro, la cebolla, un poco de limón y sal, la boca ya se me había hecho agua sin probarlos, pero al darle la primer mordida, supe el porque la gente estaba esperando afuera en la camioneta sus órdenes.

Jesús Macías, dueño del establecimiento dijo que la receta de los tacos sigue siendo la misma desde hace más de 20 años cuando iniciaron con su hermana mayor, Leonor, quien más bien siempre se portó como su madre hasta el final de sus días.

El restaurante recién abrió sus puertas y el Metro, según el dueño, a incrementado su clientela (Foto Agustín Durán/El Pasajero)

“Fue por ella que le pusimos al restaurante ¡A que tacos Leonor! Porque ella fue la que inició todo, nos enseñó el negocio y ahora simplemente seguimos su legado”, expresa Macías, quien ahora sólo llega a revisar que todo esté en orden en el restaurante, pero por años, fue el brazo derecho de su hermana.

“Los tacos y las salsas todavía se preparan como ella los cocinaba”, agregó. “El resto de los platillos los hemos elaborado con un toque y sazón al estilo de Michoacán, lugar de donde son casi todos los trabajadores porque la mayoría son miembros de la familia”.

La camioneta de comida es para las personas que van de prisa (Foto Agustín Durán/El Pasajero)

Una de las razones del porque la gente los prefiere además del sabor, son los precios, dijo Macías que incluso con letreros en el área de las salsas, pide a la clientela que utilice solamente lo que se vaya a comer sin desperdiciar para poder así seguir ofreciendo los precios bajos.

Y es que además de los tacos, que son a un dólar, podemos encontrar un huarache bien servido por $3.50, un plato de albóndigas por sólo $5.99, camarones a la diabla por $7.99 y una mojarra frita por sólo $6.99, desayunos completos por $4.99 o un pollo a la plancha o chile relleno por $5.99.

El ambiente del restaurante es tranquilo, limpio y muy agradable,  y afuera a los clientes que prefieren los tacos de la camioneta de comida, también tienen donde sentarse para poder disfrutar de su platillo, sentados y a la sombra.

Si quiere ordenar y simplemente recoger su comida, sólo tiene que marcar el (323) 354-4743 o si prefiere llegar al restaurante, las puertas se abren desde las 7 a.m. hasta las 11 p.m., los siete días de la semana.

No olvide que los fines de semana tienen menudo con tortillas hechas a mano, otro motivo por el cual vale la pena visitar el establecimiento que inició con una camioneta hace 20 años y ahora ha logrado transformarse en un restaurante formal y más sofisticado.

Y por si fuera poco, usted puede llegar viajando en Metro, ya que la Línea Dorada que viaja del este de Los Ángeles a Pasadena lo dejan en la estación Indiana, a unos cuantos pasos del restaurante, o si prefiere tomar el autobús las líneas 254 y 665 de Metro también lo llevan.

La camioneta de comida es para las personas que van más de prisa (Foto Agustín Durán/El Pasajero)

Restaurante: ¡A que tacos Leonor!
Dirección: 3566 East 3rd Street, LA, CA. 90063
Teléfono: (323) 354-4743
Horario: De 7 a.m.  a 11 p.m.
los siete días de la semana