Dana Harris estaba a punto de cruzar Hill Street cuando escuchó detrás de ella un tremendo ruido del funicular Angels Flight. Cuando volteó, vio que el vehículo se había salido de la vía y adentro había quedado varada una pasajera.
Se trataba de Melanie Sherrin, una turista de Melbourne, Australia, que llegó a L.A. el miércoles por la noche. Por fortuna, como relata el LA Times en esta nota, el susto no pasó a mayores, pues la mujer resultó ilesa.
Sherrin era la única pasajera en la parte baja del funicular cuando éste se descarriló hoy a las 11:33 a.m. Ella dice que volvería a subirse al tren, pero quiere que le regresen los 50 centavos que pagó.
Otros cinco pasajeros que estaban cerca de la parte alta de la línea también recibieron asistencia, aunque según el Departamento de Bomberos de Los Ángeles ningunó resultó lesionado.
Las autoridades dijeron ignorar la causa del descarrilamiento del histórico tren. Éste se inauguró en 1901 en otra ubicación y se cerró en 2001, después de que una falla en los frenos ocasionó un choque que mató a un pasajero de 83 años y lesionó a otros siete. El funicular se reabrió en marzo de 2010.
Según las autoridades, el funicular estará pronto en servicio, pero no se sabe cuánto tiempo tomará la investigación para saber qué pasó hoy.
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