El Consejo Económico de la Casa Blanca dio a conocer hoy un reporte en el que advierte los desastrosos efectos que tendría el hecho de que el Congreso no aprobara la extensión del Impuesto Federal a la Gasolina que vence este 30 de septiembre.

Según el reporte, se podrían perder más de 51,500 millones de dólares en fondos federales que se usan para financiar autopistas y obras de transporte, lo que ocasionaría la pérdida de un millón de empleos. El informe agrega que estarían en riesgo más de 134 mil proyectos de pavimentación y construcción de puentes, así como cinco mil obras de mejoramiento de transporte. La suspension de estas obras se traduciría en la imposibilidad de pagar su salario a unos 4,000 empleados federales.

En California, estarían en riesgo 75 mil trabajos y se tendrían que detener 6,700 proyectos de autopistas y 600 obras de transporte.

El reporte señala que la expiración del citado impuesto ocasionaría que los gobiernos estatales dejaran de recibir reembolsos por los gastos de proyectos de autopistas. Esto crearía incertidumbre, conduciría a más demoras y suspensiones de obras y eventualmente amenazaría todas las inversiones de transporte financiadas con fondos federales.

Debido a la gravedad del asunto, funcionarios de Metro trabajan en el Congreso para evitar que ese impuesto expire.