Mañana se celebra el Día de Gracias en Estados Unidos por lo que me fui a las paradas de autobuses y trenes a preguntarle a algunos de los pasajeros de Metro sus razones para agradecer y aquí sus respuestas:

Juan Carlos Luna

“Yo vivo en Arizona, Los Ángeles y Michoacán. Dejo mi carro en la Estación de Norwalk y me vengo en autobús y tren al centro de Los Ángeles a pasear.  Fíjate que tengo mucho que agradecer. Soy una persona muy feliz. Así como me ves, ya estoy pensionado. Trabajé 40 años para UPS y me retiré por el sindicato. Ahora disfruto la vida. A mi Padre Dios le doy gracias porque estoy bien, tengo mi familia y estoy muy agradecido por eso.  Me han ocurrido muchas cosas buenas. Entré a trabajar cuando tenía 15 años a UPS y esos 40 años de servicio  me están dando lo que ya trabajé y estoy muy contento. Tengo mi familia, mis hijos, mis nietos y estoy joven….  ja ja ja ja”.

Leo López

“Utilizo el tren todos los días. Voy a centro de Los Ángeles y a Chinatown a pasear en patineta con mis amigos. También a la escuela en Boyle Heights. Este año tengo que agradecer que pude reconectarme con mis padres y mis tres hermanas.  Estaba disgustado, no les hablaba ni vivíamos junto, pero la situación ya se calmó y hemos vuelto a vernos. He regresado a casa y estoy muy contento y agradecido de que mi familia todavía está aquí apoyándome”.

Roberto Coto

“Vivo en Oregón, pero soy de Los Ángeles y cuando vengo a visitar a mi familia me traslado en tren y autobús. Ahorita voy a Little Tokio a pasear a mi sobrino. Hace dos años que me mudé para Oregón y trabajo para el Estado de Oregón. Estoy muy agradecido porque este año me ascendieron a un puesto mejor y porque tengo la oportunidad de venir a ver a mi familia. Mi mamá vive en San Pedro y mi papá en Highland Park. Desde pequeño me acostumbraron a andar en el tren y autobús por eso estoy tan familiarizado con el sistema”.

Jenny Salgado

“Uso el autobús 260 y 81 y el tren Gold Line cinco veces a la semana para ir a trabajar en Fedex, voy a ver a mi familia al Sur Centro o a la Ciudad de Commerce.  Este año fue un año muy difícil por eso no tengo mucho que agradecer. Hubo muchos problemas, perdí mi trabajo y me quedé sin hogar por un tiempo. Vivía en mi carro.  Para terminar mi hermano anda en las drogas y no podemos ayudarlo. Esa es una pregunta difícil. Ahora, las cosas ya se calmaron un poco, ya conseguí trabajo y ya tengo un techo donde vivir. Por eso tengo que dar gracias y por una familia que me quiere”.

Marina Galván

“Tengo 22 años tomando el transporte público.  A veces agarró el 78 ó79 y ahora con los trenes me subo a todas las líneas del tren y he tenido muy buena experiencia. Yo doy gracias porque estoy viva y tengo salud.  Tengo a mi hija y eso es una cosa primordial para dar gracias a Dios. También debemos tener gratitud por un techo donde vivir y por la familia ya que tengo mi esposo y mi niña preciosa”.